Al interior del cielo...
Aún recordaba el funeral de Randy me hicieron poner esa ropa negra tan fea que te hace ver aún mas acabada de lo que pasaba, mi mamá y mi papá no podían ni verme a los ojos ¿Tan mal estaba? el ver a mamá con los ojos llenos de dolor, de compasión, de tristeza me indicaban que sí, lloré pero ya no sentí nada pues ya no había mayor dolor, todo lo que tenía se había ido junto con ese joven muchacho que tenía un futuro tan brillante con su talento e inteligencia.
Toda familia tiene un capítulo que no lee en voz alta este es el de la mía, la depresión que viví fue tan dura que jamás olvidaré lo drástico que fue no solo para mí también para ellos no imaginó que duró es cuando intentas todo absolutamente todo por robar una sonrisa y no recibes respuesta, literal le estaban hablando a un costal el mismo que me convertí desde aquel día que recibí la noticia y tuve que empezar a usar pastillas, recordar era volver a abrir la herida y sí aún lo odiaba y lo amaba a la vez lo odiaba por haberme dejado en mi peor miedo: sola y lo amaba por los recuerdos que me había dejado, me encerré en mi pequeño espacio mientras sabía que otra vez tenía que volver a empezar y reconstruirme, mientras tanto los odiaría a todos.
Esta experiencia me haría recapacitar y aprender, tendría una nueva misión y era apoyar y hacer más llevadera la pena de las personas que tengan algún problema,servir como escucha, dar abrazos sinceros, infundir amor y sobre todo enseñar que después de la tormenta aún hay una salida aun que parezca que no, y la llave para esa salida siempre la hemos tenido nosotros solo debemos ver que ahí ha estado toda la vida y se llama fortaleza. La fortaleza es una cualidad que todos tenemos pero no todos aprendemos a desarrollar, esta se base en vivencias, en actitud en querer salir del agujero, siempre se puede avanzar pero nosotros decidimos si lo hacemos a rastras o nos levantamos y andamos a pie. Esto también lo aprendí a la mala.
Después de todo lo que sucedió pensé que jamás me casaría, nadie me ilusionaría sin tener algo seguro ya, jamás me pondría un anillo que simbolizara unión, ¿De qué sirve un anillo de unión si al final te irías? ¿Existe la promesa de un para siempre? no permitiría que se arruinaran mis planes, no de nuevo y algo sería ley para mí, si me olvidas te odiaría así de simple no hay más así me causarías menos dolor.
¿Había alguna otra opción para sanar que no fuera odiar? Tal vez sí pero yo no conozco otra que me funcione pero no todo es maldad odio y dolor. Esta es mi barrera no mi destino y solamente me sirve para hacer más fácil el proceso.
Pero como todo siempre hay una excepción a la regla. Y como todo hasta a la más cabrona le llega su excepción. A mi también me paso.